Las cebollas contienen una sustancia inodora "inofensiva", al cortarla se libera una enzima que hace reaccionar a esta sustancia y producir entre otros una sustancia lacrimógena. Ésta se volatiliza fácilmente y al entrar en contacto con la humedad del ojo produce ácido sulfúrico diluido (muy diluido, no se espanten) esto produce irritación y lagrimeo, lo que lava el ojo.
Ahora bien, como evitamos llorar?
- Utiliza un cuchillo afilado, evita la dispersión de líquido.
- Coloca las cebollas en la heladera antes de cortarlas, las enzimas en frio están menos activas
- Mantén mojada la hoja del chuchillo, esto diluirá la sustancia lacrimógena y no llegará a tus ojos.
- Coloca las mitades peladas de cebolla en agua unos minutos antes de comenzar a picar, esto hará que se diluya ésta y otras sustancias y reducirás también los gases que se producen en el estomago.